Una de las ciudades más importantes de Suiza es Basilea, situada a menos de 90 km de Zurich, la ciudad más importante.
Esto se debe a la cantidad de construcciones de importancia historia y cultural que allí se encuentran.
El ambiente es medieval casi por completo, pero tiene zonas que muestran que la modernidad le va muy bien a la ciudad. Si tienes el placer de llegar a esta parte del mundo, podrás vivir un poco de historia en tu propia piel.
Acompáñanos en este artículo en el que te vamos a enseñar lo mejor de la ciudad.
¿Qué ver en Basilea en un día?
Basilea es una de esas ciudades que aparenta nacer con el amanecer y morir en la madrugada, cuando nadie está atento, para hacerlo de nuevo al día siguiente. Por desgracia, no todos pueden darse el lujo de pasar varios días en ella. Lo común es dedicarle sólo un día y por esto es que hay que tratar que éste rinda lo más posible.
Es por eso que lo mejor que puedes hacer es un plan detallado de la visita a Basilea, para poder aprovecharlo al máximo. Si deseas conocer todo lo que hay que ver en Basilea y alrededores, presta atención a este artículo. Vamos a contarte los lugares que puedes visitar en esta ciudad.
Algunas de las actividades que más nos gustaron y que puedes hacer en un día en Basilea son las siguientes:
- Basilea: tour a pie por el centro histórico
- Bienvenido a Basilea: tour privado con guía local
- Visita histórica de Basilea para grupos
Catedral de Basilea
La Catedral de Basilea es uno de los puntos que más turistas atrae en la ciudad. Es un punto obligado de visita para quienes se interesan por el arte, la arquitectura, religión e historia.
La también llamada Basler Münster es de lo más importante que ver en Basilea, y si visitas la ciudad asegúrate de dedicar el tiempo suficiente para apreciar todo lo que hay allí, empezando por su preciosa fachada.
Si el día es soleado, subir al mirador en lo alto de la catedral te dará una vista impecable de las plazas aledañas y las casas cercanas con techos de tejas antiquísimas.
Es el lugar ideal para tomar las mejores fotos de la ciudad.
Hay algunos guías que ofrecen sus servicios por un precio bastante accesible, algo que es bastante recomendable si deseas conocer más sobre los detalles que envuelven la catedral.
Estos guías tienen conocimientos históricos valiosos para compartir y muchos hablan español.
Munsterplatz
Ubicada en el lado posterior de la Catedral de Basilea, la plaza Munsterplatz recibe a lo mejor del turismo en Basilea.
La plaza es grande y diáfana y cuenta con bastantes bares y restaurantes donde poder hacer una parada y comer.
Es totalmente recomendable ir al atardecer, justo después de visitar la catedral, así podrás descansar y observar la puesta de sol desde un cómodo lugar y con una copa de vino en la mano.
Plaza del mercado o Marktplatz
El lugar ideal para visitar durante el día es el centro de la ciudad, donde se encuentra la Plaza del mercado o Markplatz, como también se le conoce.
Allí se encuentran varios mercados de frutas y alimentos durante los fines de semana. En los otros días, es posible disfrutar de algunos artistas urbanos que son el deleite de los turistas.
También podrás ver a una cantidad importante de vendedores de flores que llenan el ambiente de colores y aromas maravillosos.
Puente Mittlere
El Puente Mittlere Brucke es una parte importante del río Rin que, dicho sea de paso, es el río con mayor importancia en la Unión Europea.
Este puente fue construido originalmente en el año 1226, pero era completamente diferente a lo que se puede ver ahora.
Esto se debe a que sufrió una remodelación casi completa en 1905 con motivo de la inauguración del tranvía de la ciudad.
Por tanta historia e importancia actual, el puente es un lugar importante que ver en Basilea. Además, caminando por él, es posible admirar las casas de estilo medieval que dotan a la ciudad de un ambiente mágico.
Puerta medieval de Spalentor
La mítica puerta gótica de Basilea, o Puerta medieval de Spalentor, se encuentra en la zona oeste. Forma parte de un grupo de 4 puertas del mismo estilo, y ésta es la que más ornamentos tiene de todas. Dichas puertas formaron parte de las murallas de Basilea en torno al año 1400.
Gran parte del turismo en Basilea se concentra en esta puerta, cuyo tamaño es impresionante. La construcción es de total estilo medieval, tanto que te parecerá estar frente a la puerta de un castillo, con un par de torres del estilo en los costados y una cúpula puntiaguda de varios metros de altura en la parte superior.
Ayuntamiento de Basilea
El Ayuntamiento de Basilea en Suiza es uno de las construcciones más importantes de la ciudad. Algunos de los residentes consideran que es uno de los iconos por múltiples razones. La fachada del edificio tiene un llamativo diseño de color rojo y oro, la cual es imposible de ignorar en la Markplatz.
La construcción del ayuntamiento tiene más de 500 años y ha tenido el mismo uso desde esas fechas. En este edificio se realizan reuniones parlamentarias y gubernamentales del Parlamento Cantonal y del Gobierno del Cantón de Basilea-Ciudad.
Museo Tinguely
El museo dedicado a Jean Tinguely ubicado en Basilea es una visita obligada para cualquiera en esta ciudad. El Museo Tinguely tiene en su interior gran parte de las pinturas y esculturas creadas por el artista suizo.
Lo más impresionante de su exposición permanente son las esculturas hechas de hierro. Algunas ellas incluso cuentan con sonido y movimiento. Una zona muy popular en el museo es la dedicada a la Fórmula 1, donde más de 60 piezas de diferentes coches monoplazas se exponen de forma muy especial, formando diferentes figuras.
Algunas de las piezas de coches fueron parte de los conducidos por Eddie Cheever y Alain Prost, donados por Renault al museo.
El museo se encuentra en las orillas del río Rin, y la estructura del edificio es en sí algo muy llamativo. El diseño de la construcción fue hecho por el arquitecto suizo Mario Botta, quien dirigió la edificación de principio a fin. Él mismo pidió participar en la obra debido a su admiración profunda de Jean Tinguely.
Turismo en Basilea viendo las fuentes de la ciudad
Las fuentes de Basilea son un espectáculo que reúne cientos de personas día a día, y por esto representa uno de los puntos de reunión de los turistas. La versatilidad de las fuentes es tanta que logran, con ayuda de un juego de luces impresionante, recrear formas de animales y de figuras icónicas del país.
Se trata de un espectáculo casi mágico que no te dejará alejarte de ellas en varios minutos. Podrás encontrarlas en muchos puntos de la ciudad. En verano, está permitido que los niños se bañen en las fuentes, lo que resulta bastante llamativo y divertido también.
Zoológico de Basilea
El Zoológico de Basilea ha sido tan apreciado por los residentes de la ciudad y sus visitantes desde su inauguración en 1874, que se le llama de forma cariñosa “Zolli”.
En él podrás ver una gran variedad de animales, entre “comunes” y exóticos.
El territorio del Zoo incluye un parque con áreas verdes y juegos para quienes gusten visitarlos. Todo está adaptado para funcionar en cualquier época del año, lo cual es impresionante, teniendo en cuenta lo crudo que puede resultar el invierno en esta parte del mundo.
El mejor momento para visitar el parque zoológico es en verano.
En el zoológico hay diferentes zonas en las que está dividido el terreno:
- Una de las más populares es la del Vivario, donde se puede admirar una variedad importante de especies acuáticas desde muy cerca.
- Otra parte que reúne grandes cantidades de personas es la zona cercada de leones gamgoas, que es un espectáculo en sí mismo.
- La zona de los monos (que fue remodelada de manera reciente) está diseñada como una gran casa. Es una zona muy divertida, ya que observarlos en un hábitat como éste es muy curioso y entretenido, en especial si viajas en compañía de niños.
Algo que llama mucho la atención y capta el interés de los más pequeños es la zona de los animales cachorros. Cada vez que nace un nuevo animal en el zoológico, este es llevado a una zona especial junto con sus padres.
Si tienes suerte, podrás ver a cachorros leopardos con sus madres.
El zoológico de Basilea abre cada día a las 11:00 de la mañana y cierra cuando llega la noche.